jueves, 12 de agosto de 2010

Tombuctú







[...]el desconcertante descubrimiento de lo silencioso que es el destino cuando, de repente, estalla.

Alessandro Baricco, Océano mar

1 comentario:

  1. Oh, así que ya vuelves a dar envidia con tus fotos clásicas, eh?? Espero que la sentencia horaciana sea cierta y que no hayas regresado con el animum mutatum :) Yo me acabo de leer Las Troyanas, pero ahora me han entrado ganas de volver siquiera un ratito a la posada Almayer...

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