lunes, 27 de septiembre de 2010

Socarrats



A Ernesto le apasionaba el tema de la predestinación. ''En la vida de cada hombre-decía-, sólo existe una mujer con la cual puede conseguir una unión perfecta, y en la vida de cada mujer sólo hay un hombre con el que ella puede ser completa.'' Pero el encuentro era un destino de pocos, poquísimos. Todos los demás se veían obligados a vivir en un estado de insatisfacción, de perpetua nostalgia. ''¿Cuántos encuentros de ésos habrá?-decía en la oscuridad del dormitorio-. ¿Uno de cada diez mil, uno de cada millón, de cada diez millones?'' Uno de cada diez millones, sí. Todos los otros son adaptaciones, simpatías epidérmicas, trasitorias, afinidades físicas o de carácter, convencionalismos sociales.

...

[...] al pasear por el parque pensé que en ese momento lo más bello sería morir. Parecerá raro, pero la máxima felicidad, al igual que la máxima desdicha, trae consigo siempre este contradictorio deseo. [...]yo no tenía ganas de bajar, de meterme en la maleza; quería zambullirme en ese color celeste y quedarme allí para siempre, dejar la vida en el momento más alto.


Susanna Tamaro, Donde el corazón te lleve










Cada vez que abres la puerta y desempañas el cristal
querremos volver a puerto una vez en alta mar.

1 comentario:

  1. Safo y Alceo en los aseos del Corte Inglés :O Hay que ir ya, antes de que desaparezca...

    *__*
    El segundo párrafo es muy Club de los poetas muertos, ¡me gusta!
    Tengo ganas de ver la peli again, algo extraño en mí O.o La tienes? o me tengo que conformar con el anuncio de Línea Directa? :/

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